A partir de los compromisos laborales establecidos en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), existen al menos 14 potenciales demandas laborales en proceso.
Además, la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca implicará una intensa supervisión para que el país cumpla con los compromisos laborales establecidos en el T-MEC.
El socio fundador de la firma De la Vega & Martínez Rojas, Óscar de la Vega, indicó que tanto el gobierno mexicano como el estadounidense actualmente buscan conciliaciones en estos casos. Ante esto, anticipó que durante el primer trimestre de 2021 se realice un uso exhaustivo del mecanismo de respuesta rápida del T-MEC.
Una vez que Biden tome posesión, el ala demócrata subirá de intensidad el monitoreo:
Sobre todo porque los sindicatos americanos como la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO, por sus siglas en inglés), son los más interesados en que se cumpla el capítulo 21 anexo A del T-MEC, y hay que poner atención a ellos, son sindicatos fuertes y con mucho presupuesto.
De acuerdo con el abogado laboral, la ley americana fijará sus esfuerzos en los sectores de mayor exportación, ya que son las industrias que más intercambios de divisas generan entre México y EU, donde sobresale el sector automotriz, las autopartes, minero, cementero, aluminio, pastelerías industriales, call centers, industria electrónica, entre otros.
En caso contrario, cabría esperar que Estados Unidos solicite sanciones para las compañías que infringen esas normas.
Retos de México en materia sindical
El 18 de noviembre, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció el comienzo de la primera etapa del Nuevo Sistema de Justicia Laboral en ocho estados del país, el cual da respuesta a las demandas de los Gobiernos de Estados Unidos y Canadá en el marco de la firma del T-MEC.
La representación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en México presentó algunos de los retos y prioridades que el país latinoamericano enfrentará en 2021. Entre los principales, resaltó la necesidad de avanzar en la legitimación de los contratos colectivos de trabajo, así como en la implementación de la reforma laboral, e igualmente, en la incorporación de nuevas reglas en materia de subcontratación, teletrabajo y cobertura de seguridad social.