La Comisión Nacional Única de Negociación (CNUN) de la CNTE viene sosteniendo mesas de diálogo con López Obrador y diversos funcionarios públicos, como el secretario de Educación, Esteban Moctezuma. El 8 de octubre se reunieron por 15° ocasión.
En dicha reunión, entre otras cuestiones, se acordó cubrir los adeudos a los docentes de Michoacán, la reinstalación de 25 maestros más despedidos en el sexenio pasado, la liberación de 7 de 8 normalistas presos y realizar gestiones para la reapertura de la normal rural de El Mexe.
Sobre el recorte del 95% al presupuesto del próximo año para las normales, planteado en dicha mesa por la CNUN, AMLO respondió que, “si bien es cierto lo del recorte, no habría afectaciones al normalismo, puesto que su política educativa esta en cuatro puntos: 1.- garantizar los salarios y prestaciones del magisterio. 2.- la aplicación de nuevos contenidos. 3.- Fortalecimiento de la infraestructura de los planteles, a través del programa la escuela es nuestra. Y 4.- becas escolares.” (Relatoría de la CNUN, 8 de octubre).
Es, por decir lo menos, preocupante que los representantes de la CNTE se conformen con esta respuesta por parte del presidente, cuando la magnitud del recorte significa prácticamente la liquidación de las normales públicas.
Llevamos siete meses (descuéntese el periodo vacacional) desde que la SEP impuso la educación a distancia, con todas sus consecuencias, como la exclusión y el rezago educativo, la precarización laboral docente, el endeudamiento de madres y padres para contratar servicios y comprar equipos, el riesgo de salir a la calle para buscar señal de internet, la injerencia de las empresas de servicios digitales (avance de la privatización), etc.
Durante todo este periodo, distintos sectores de la CNTE se han limitado a desarrollar alternativas para darle continuidad al ciclo escolar, pero sin cuestionar la continuidad misma del ciclo en medio de la pandemia, ni plantear un acompañamiento docente a las y los alumnos con contenidos acordes a estos tiempos, sin que esté sujeto a calificación y exigiendo los medios tecnológicos para llevarlo adelante.