Trabajadores sindicalizados de la UNAM denunciaron presiones y amenazas por parte de la dirigencia de su propio sindicato, al asegurar que se busca despojarlos de predios otorgados como prestación laboral desde hace más de tres décadas en el Estado de México.
Los inconformes señalaron que son poseedores legítimos de alrededor de 60 hectáreas ubicadas en el Rancho La Brisa, en el municipio de Teoloyucan. Explicaron que estos terrenos fueron asignados en 1993 por el entonces liderazgo del Sindicato de Trabajadores de la UNAM como parte de acuerdos laborales vigentes en ese momento.
Además, afirmaron que la actual dirigencia sindical les informó que los predios habrían sido vendidos, pese a que forman parte de su patrimonio. Según los testimonios, se les exige entregar las propiedades bajo advertencias de desalojos forzados y demolición de construcciones.
UNAM enfrenta conflicto por patrimonio laboral
Los trabajadores sostuvieron que la oferta de compensación económica resulta mínima frente al valor real de los terrenos. En consecuencia, consideran que existe un intento de consumar un despojo que afectaría directamente su seguridad patrimonial y familiar.
También indicaron que acudieron a instancias federales y estatales para presentar denuncias formales por amenazas y posibles irregularidades. Sin embargo, afirmaron que hasta ahora no han recibido una respuesta efectiva por parte de las autoridades competentes.
Preocupación por la seguridad y exigencia de intervención oficial
Los denunciantes subrayaron que el conflicto no solo involucra un tema interno del sindicato, sino también el respeto a derechos laborales adquiridos. Aseguraron que la incertidumbre generada impacta la estabilidad de decenas de familias vinculadas a la UNAM.
En los documentos presentados ante autoridades locales y federales, los trabajadores reiteraron su exigencia de que se respete el patrimonio entregado como prestación laboral y se investiguen posibles responsabilidades administrativas y penales.
El caso ocurre en un contexto donde miles de trabajadores universitarios mantienen vínculos laborales de largo plazo con la UNAM, una institución que concentra una de las plantillas sindicalizadas más grandes del país.
