El conflicto laboral del Nacional Monte de Piedad (NMP) en México entra en una nueva etapa con la aparición de un sindicato externo que se presenta como “tercero interesado” y propone poner fin a la huelga. Este grupo busca participar en la negociación colectiva y disputarse la representación legal de los trabajadores, lo que ha encendido el debate sobre la autonomía sindical dentro de la institución.
La huelga inició tras denuncias por violaciones al contrato colectivo y presiones hacia la base laboral. El sindicato actual sostiene que la dirección del NMP pretende modificar condiciones de trabajo bajo el argumento de dificultades financieras, pese a reportes recientes de utilidades. Por su parte, el sindicato externo impulsa una votación para redefinir la dirigencia, alegando que el conflicto “ya está agotado”.
Negociación colectiva y autonomía sindical
El enfrentamiento abre una discusión sobre el respeto a la representación legítima de los trabajadores. De igual manera, especialistas advierten que la intervención de un sindicato ajeno puede vulnerar la independencia sindical y generar precedentes preocupantes en otros sectores.
Los días 12, 13 y 14 de noviembre se realizará una consulta para decidir si la huelga continúa o si se levanta, lo que determinará el futuro del contrato colectivo y la relación laboral con la institución.
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Mientras tanto, más de 300 sucursales del Nacional Monte de Piedad permanecen cerradas y miles de trabajadores siguen sin ingresos. Este escenario no solo afecta a la base sindical, sino también a usuarios que dependen de la institución para obtener créditos o empeños. En consecuencia, el desenlace del conflicto marcará un precedente clave para el sindicalismo mexicano y la protección de la negociación colectiva.
