La reciente actualización de cuotas en materia de seguridad social en México se presentó como un avance, pero en realidad solo beneficiará a una fracción de quienes laboran mediante aplicaciones digitales. El ajuste, anunciado en octubre, no incluye a la mayoría de repartidores y conductores que permanecen en esquemas precarios sin acceso pleno a derechos laborales.
Las organizaciones sindicales han señalado que la medida representa un paso insuficiente para garantizar igualdad de condiciones, pues deja fuera a miles de trabajadores que sostienen gran parte de la economía digital. Además, expertos en relaciones laborales advierten que los criterios de inclusión favorecen únicamente a quienes tienen un volumen de actividad más alto en las plataformas, lo que genera desigualdad entre quienes cumplen funciones similares.
Seguridad social y cobertura limitada
La seguridad social es un derecho básico, sin embargo, en el caso de los trabajadores por aplicación la cobertura parcial refuerza la brecha entre la formalidad y la informalidad. También preocupa que el esquema no contemple la protección a familiares dependientes ni acceso universal a servicios médicos, prestaciones por incapacidad o pensiones. En consecuencia, la mayor parte de los empleados de este sector seguirá en vulnerabilidad.
Los sindicatos subrayan que la legislación mexicana necesita avanzar hacia un marco más inclusivo que contemple a todos los trabajadores de plataformas, sin importar su nivel de actividad. De igual manera, recalcan la urgencia de establecer mecanismos de supervisión que aseguren el cumplimiento real de las aportaciones y que no dependan únicamente de la buena voluntad empresarial.
