Los sindicatos franceses: Confederación General del Trabajo (CGT), la Federación de Sindicatos Unidos y Solidaires, realizarán el jueves una jornada nacional de movilizaciones contra las políticas del Gobierno del presidente francés Enmanuel Macron.
Las movilizaciones se llevarán a cabo en las ciudades de Marsella, Lyon, Toulouse, Niza, Nantes y Estrasburgo. Se anuncian manifestaciones con interrupciones y ajustes en el transporte público.
De acuerdo con la CGT en su convocatoria, el presidente, Emmanuel Macron, prometió un plan para avanzar hacia una etapa pospandemia marcada por la justicia social, pero sus acciones toman distancia de ese discurso.
Los sindicatos franceses reclaman un aumento salarial para que no haya salarios y pensiones por debajo de los 2,000 dólares netos, una reducción del tiempo de trabajo para trabajar mejor y trabajar todos a 32 horas semanales y la deslocalización de la industria que contribuya al progreso ambiental.
Además, demandan el abandono del seguro de desempleo y reformas de las pensiones, pospuesto por la crisis de la Covid-19, pero relanzado por el gobierno durante el verano. Para los sindicatos, la reforma del seguro de desempleo hundiría a miles de desempleados y trabajadores precarios en la pobreza.
Mientras el ministro de Transporte dijo «no entender» por qué van a la huelga los trabajadores. Francia enfrenta un debate nacional sobre el financiamiento de las pensiones y el alargamiento de la edad de jubilación, lo cual está en la base de las protestas que se suceden desde hace varios meses por todo el territorio nacional.
La CGT, uno de los dos sindicatos más grandes de Francia, junto a la CFDT, acusa al mandatario de lanzar un programa favorable a las empresas y no a los trabajadores, en alusión a la iniciativa por 100,000 millones de euros presentada hace unas semanas por el primer ministro, Jean Castex.
