El reconocimiento pleno del acoso laboral en México avanzó con fuerza después de que el Senado situó el tema en el centro de la agenda legislativa. La discusión creció porque miles de personas en el país enfrentan agresiones cotidianas que dañan su salud, su estabilidad y sus oportunidades de desarrollo. El dictamen aprobado en comisiones abre la puerta a un marco jurídico más claro y más cercano a las necesidades reales de quienes trabajan.
La reforma a la Ley Federal del Trabajo incorpora conductas que antes no estaban reconocidas, como el ciberacoso y diversas prácticas discriminatorias. Además, obliga a empleadores a prevenir estas agresiones y reparar el daño, un cambio que busca garantizar ambientes laborales seguros en todos los niveles.
Nuevas reglas contra el acoso laboral en México
Por otro lado, el dictamen define la violencia laboral como prácticas inaceptables ejercidas entre personas con vínculo laboral y subraya que pueden darse en cualquier jerarquía. Asimismo, la reforma integra cinco tipos de violencia: económica, física, patrimonial, psicológica y sexual. De igual manera, establece que el acoso laboral, el ciberacoso y la discriminación podrán ser causales de despido justificado sin indemnización.
En consecuencia, los empleadores deberán contar con medidas preventivas y mecanismos de reparación. También deberán actualizar protocolos internos, sobre todo ante conductas digitales como correos hostiles, mensajes intimidatorios o vigilancia excesiva. Por otro lado, la reforma responde a compromisos del Convenio 190 de la OIT, que México ratificó con el objetivo de erradicar la violencia laboral en todas sus formas.
Avances legislativos y evidencia del problema creciente
Del mismo modo, el dictamen avanza hacia el pleno del Senado tras su aprobación en dos comisiones. Además, legisladores señalaron que la armonización legal era urgente, pues la legislación vigente no contemplaba las nuevas modalidades de agresión derivadas de tecnologías digitales.
El impacto social es evidente. Un reporte reciente señala que el 49 por ciento de las personas trabajadoras en México ha experimentado acoso laboral al menos una vez, y en muchos casos en más de una ocasión.